Etérea hasta decir basta, "Picnic at Hanging Rock" nos sumerge en un mundo hecho para dejarse llevar por cada una de sus secuencias, donde la estupenda fotografía y la atmosférica banda sonora nos mantienen alerta durante los 110 minutos que dura la película. Incluso cuando no sucede nada, su recreación de un espacio tan inquietante, fantástico y lleno de intriga condena nuestros sentidos al más estricto cautiverio.
Un punto bastante innovador de la película, es que la temática cuaja en un mismo cazo el misterio, el drama y el suspense de forma inusual, con una luminosidad, naturalidad y antitenebrismo sobrecogedoress.
La película está basado en hechos reales y es una adaptación del libro de John Lindsay. El día de San Valentín de 1900 en Australia, un grupo de niñas sale de excursión con la escuela para hacer un picnic en Hanging Rock. Lo que les suceda allí quedará en el inconsciente colectivo de una población como una marca indeleble al paso del tiempo.
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